Licencias/Norberto Gasque Martínez
Recientemente cumplí 73 años, sucedió el 7 de junio pasado y escribí estas líneas que nacen desde el fondo de mi corazón, para llegar a los amables lectores de diferentes edades.
Uno de los aspectos más importantes al llegar a esta edad, en que más nos observa y juzga la gente que nos rodea, es en lo físico; cómo nos vemos, cómo caminamos, la actitud que tenemos, la energía que proyectamos, pero sobre todo la lucidez mental y “que sigamos trabajando”.
Desafortunadamente muchos amigos contemporáneos, efectivamente, por diversas circunstancias personales, han dejado de realizar actividades productivas remuneradas o ya no atienden sus propios negocios y veo que su deterioro es más rápido.
Cuando nos ven y nos preguntan la edad, porque tenemos que expresarla para algún trámite, las expresiones varían, sin que uno las solicite: “ah! Qué bien está, no parece de esa edad”; “qué bien se conserva licenciado”.
No obstante, hace un año que acudí a un programa de fisioterapia para la tercera edad, encaminado a mejorar postura, equilibrio, flexibilidad, masa muscular, etc., en la clínica MOVENSA donde me envió mi hija Ruth, doctora especializada en traumatología, habíamos varias personas realizando nuestros ejercicios y una señora que se quejaba de las rutinas que le asignaban, decía que casi como de tortura, pedía que se las alivianaran; y como para darme un cumplido, dijo: “No todos estamos tan bien como el licenciado Paulino, para hacer tanto ejercicio”, dirigiéndose al instructor, “considere que yo tengo 76 años y aunque el licenciado se conserva muy bien a sus 80 años, es muy cansado”.
¡Zaz! Nada más nos volteamos a ver el fisioterapeuta y yo (sabiendo mi edad) y le contesté a la señora: “favor que me hace usted amiga, fíjese nada más el trabajo que hago para conservarme” y nos reímos todos.
Así, es bueno que adoptemos actitudes positivas y de energía y ánimo a nuestra edad. Es lógico que adolezcamos de algunos malestares o quizá hasta de enfermedades añejas o crónicas, pero debemos darles atención y atacarlas con medicina, disciplina y buenos hábitos. Cuántos de nuestra generación andan mal de la vista, del oído, de las piernas, o caminan encorvados, son muy sedentarios y carecen de actividades productivas que repercute en su desgaste físico.
Pero el otro elemento que debemos mantener más activo es el mental, el intelectual, el cultural y de entretenimiento; la salud mental es imprescindible para una vida plena; el ánimo, la observación, el espíritu analítico y si se acompaña con la música, el canto, el baile, la lectura, la poesía, tendremos un cuadro de estabilidad emocional para convivir cordialmente con la familia, con los amigos y relaciones de negocios si aún mantenemos actividades de trabajo productivo.
Otra parte de nuestra forma de vida a esta edad es sin duda huir, rechazar o evadir a personas que ahora les llaman “tóxicas”, porque solo generan intrigas, problemas, conflictos y malas vibras. Recuerdo que poco antes de culminar sus días de vida el famoso, reconocido y estimado Dr. Santiago Hernández Ornelas, una de las últimas veces que convivimos y en una comida se acercó un personaje tóxico de los que describí, buscando discusión y polémica contra los taurófilos, sabiendo que nosotros gustamos de la fiesta brava; el Dr. Hernández Ornelas lo escuchó muy amable y atento, luego sacó su cartera y extrajo una tarjetita que le entregó al sujeto incómodo; éste la leyó y se retiró de inmediato.
El Dr. Hernández soltó tremenda carcajada a la vez que expresaba: “sí funcionó”. Era obligado preguntarle qué le entregó. Sin decir más y continuando su risa, sacó otra tarjeta igual y me la dio, parecía de presentación, pero al reverso tenía una leyenda; cuando la leí también me reí. Tenía impreso lo siguiente: “Si interrumpe mi buen ánimo, o pretende incluirme en algún conflicto, crearme algún problema, o simplemente abusar de mi tiempo y atención, le suplico me evite la pena de mandarlo a ching… a su madre”.
Estos tres temas sobre la vida de personas contemporáneas como nosotros son recomendables, pero el recurso de las tarjetitas es opcional. Gracias amables lectores.