La seducción de las palabras/Federico Berrueto
Cada vez que una mujer llega a un cargo de poder y liderazgo es un avance para caminar hacia la igualdad y equidad de la representación de mujeres en puestos de decisiones importantes, siempre y cuando sean realmente ellas las que toman las decisiones, eso es lo que vamos a ver en el gobierno del presidente de Estados Unidos Donald Trump.
Trump ha elegido mujeres preparadas con experiencia y capacidad para formar parte de su gabinete en posiciones importantes como la seguridad nacional, educación o trabajo. Una de las más nombradas en los últimos meses por su papel que llevará a cabo y la gran experiencia que la acompaña es Susie Wiles ha sido nombrada jefa de gabinete de la Casa Blanca, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar este cargo. Cuenta con una amplia trayectoria en la política, es considerada por el mandatario estadounidense como una mujer “fuerte, inteligente e innovadora”, en 2016 y 2020 dirigió las campañas de Trump en Florida. En el 2024, fue la responsable de idear una estrategia presidencial más sofisticada y disciplinada en apoyo a Trump.
Pamela Bondi, ha sido nominada para ser la próxima fiscal general de Estados Unidos. Su trayectoria en el ámbito legal y su lealtad a Trump la posicionan como una figura clave en su administración, especialmente en un momento donde las políticas de justicia son críticas. Anteriormente se desempeñó como exfiscal general de Florida.
La gobernadora saliente de Dakota del Sur, Kristi Noem, encabezará el Departamento de Seguridad Nacional. Noem tiene experiencia legislativa como exrepresentante en el Congreso y ahora supervisará agencias clave como Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA).
Linda McMahon, Secretaria de Educación una de las más polémicas desde su nombramiento por saltar de la lucha libre a la educación, trabajó con Trump durante su primer mandato en la Administración de Pequeñas Empresas y ha sido una ficha clave en la recaudación de fondos para el presidente electo, además de destacarse como cofundadora de la WWE, una empresa de medios y entretenimiento que incluye el área de la lucha libre profesional que hoy es un emporio que cotiza en bolsa. Ese éxito no lo ha replicado en el plano político, ya que se presentó dos veces al Senado, en los años 2010 y 2012, sin lograr el escaño.
Brooke Rollins, Secretaria de Agricultura, actual directora ejecutiva del America First Policy Institute, asumirá el liderazgo del Departamento de Agricultura. Anteriormente, fue directora del Consejo de Política Doméstica durante el primer mandato de Trump y presidenta de la Texas Public Policy Foundation durante 15 años. Su experiencia en políticas públicas la posiciona como una figura clave para los agricultores estadounidenses.
De origen hispano Lori Chávez-DeRemer, exrepresentante republicana de Oregon, dirigirá el Departamento de Trabajo. Con experiencia en el ámbito empresarial y laboral, se espera que impulse políticas que fortalezcan la economía y las oportunidades laborales para los estadounidenses.
Tulsi Gabbard, fue designada como Directora de Inteligencia Nacional excongresista demócrata convertida en alianza republicana, será responsable de coordinar las principales agencias de inteligencia estadounidenses, incluidas la CIA y la NSA. Su nombramiento ha generado atención por su cambio político y su enfoque en temas estratégicos internacionales.
Karoline Leavitt, Secretaria de Prensa es la integrante más joven del gabinete presidencial de Donald Trump. A sus 27 años, se convertirá en secretaria de Prensa. Durante el primer mandato de Trump trabajó como secretaria de prensa adjunta.
El desempeño de cada una de ellas será de suma importancia por su impacto sobre todo donde inciden los derechos humanos como la fiscalía, el departamento de seguridad nacional, educación y trabajo, evidentemente todas comparten la ideología y políticas de Trump, pero lo importante es que sean autónomas y muestren carácter a la hora de tomar decisiones, ocupar esos espacios para seguir la línea del presidente sin la libertad de usar su criterio no servirá de mucho, su responsabilidad y obligación es gobernar para todas y todos más en un contexto donde las acciones del primer mandatario son contra la comunidad LGBT al reconocer solo dos géneros, políticas migratorias violatorias de derechos humanos y un discurso radical y amenazante. Que sean mujeres las que estén al frente de estos cargos es significativo, pero será más significativo que en la práctica, realmente ejerzan el poder que les dan sus cargos.