
El gusano barrenador y la defensa de la vida
El tren
Caminando la carreta se acomodan las calabazas, reza el dicho popular. Así va marchando el tren de la cuarta transformación a siete años de su llegada a México.
El informe de gobierno de la primera mujer presidenta del país, a 11 meses de asumir el cargo, con un nivel de popularidad del 79 por ciento, entre los más altos del mundo, (Fuente: Enkoll) se da con datos importantes que indican que hay rumbo y voluntad por mejorar, principalmente, en materia de seguridad.
Lo cierto es que hay avances y retos por superar; por un lado Claudia Sheinbaum destacó la disminución del 25 por ciento en homicidios dolosos en todo el país y su gobierno ha mostrado voluntad por enfrentar a grupos criminales, lo que ha sido reconocido por organismos patronales como Coparmex; que también pone puntos sobre las íes, al señalar como temas por resolver: la guerra sin cuartel entre Chapitos y Mayitos en Sinaloa, personas desaparecidas, (133 mil en México) robo a transporte de carga, a lo que se suma la industria delictiva y millonaria del huachicol, temas que estuvieron fuera del informe.
Por otro lado, Claudia Sheinbaum destacó cifras alentadoras, como el crecimiento del 1.2 por ciento del PIB, -en un entorno global calificado como: catastrófico por algunos organismos internacionales-, desempleo del 2.7 por ciento, que coloca a México como el segundo país con menor desigualdad en América, sólo antecedido por Canadá, y la inflación controlada en un 3.5 por ciento, (a Julio del 2025).
Claudia Sheinbaum destacó que esos logros se deben a un nuevo modelo de estabilidad macroeconómica y prosperidad compartida con un enfoque de salarios justos y programas sociales de bienestar; pero fue a más profundidad al criticar el modelo neoliberal impuesto en México desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, que refería que aumentar el salario mínimo provocaría inflación y que el Estado debía hacerse a un lado de los macroproyectos de infraestructura del país.
Han pasado siete años de la llegada de un nuevo régimen en México, impulsado por López Obrador, mencionado de forma mesurada por Sheinbaum en su discurso, pero, al margen de ideologías políticas, la presidenta destacó obras de gran envergadura bajo el control del Estado mexicano, (algunas bajo el esquema de inversión público-privada).
Hizo énfasis en la recuperación de los trenes como el avance de la construcción del Tren Maya de carga, el tramo Lechería-AIFA, el tren Insurgente en la Ciudad de México, las nuevas líneas CDMX-Pachuca, CDMX-Querétaro y los proyectos Saltillo-Nuevo Laredo y Querétaro-Irapuato con obras que se prevé inicien en septiembre, además del avance de las obras del tren Interoceánico.
Dejando fuera de la ecuación tintes partidistas, el rescate y modernización de la red ferroviaria, como una acción estratégica de conectividad en México, tanto para transporte de carga como de pasajeros, desarrollo de infraestructura y generación de empleo; es sólo un ejemplo que derrumba el discurso neoliberal impuesto en México durante más de treinta años, aunado a un aumento sostenido del 135 por ciento del salario mínimo con una inflación controlada.
En una mirada de 360 grados, no podemos cerrar los ojos a esos avances en infraestructura, pero tampoco podemos deslumbrarnos ante retos fundamentales y paralelos como la nueva era de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pues deberán demostrar que, más allá de la forma en que llegaron, mantengan su autonomía.
En el tren de la cuarta transformación también la forma es fondo, en el primer informe de Claudia Sheinbaum ocuparon la primera fila la secretaría de Gobernación, su gabinete de seguridad y su familia, Adán Augusto López estuvo en la cuarta fila y Andrés Manuel López Beltrán ocupó la quinta fila, junto a Luisa María Alcalde. Caminando la carreta se acomodan las calabazas, regresando al dicho popular.