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LEÓN, Gto., 25 de junio de 2025.- La Fiscalía General del Estado de Guanajuato (FGEG) informó que logró hacer justicia y recuperar el dinero de un hombre al que le fue robado de su hogar. El 10 de junio de 2025 prometía ser un día más para Juan Carlos, un comerciante leonés de 54 años dedicado al transporte y venta de mercancía. Con la rutina de siempre, salió temprano de su hogar en León, Guanajuato, sin imaginar que al regresar, la tranquilidad de su vida se vería abruptamente interrumpida por un amargo suceso.
Al volver a su casa, Juan Carlos encontró claras señales de una intrusión. Una ventana dañada confirmó sus sospechas, las cuales se materializaron en la dolorosa realidad de una caja fuerte desaparecida. En su interior, se resguardaban los ahorros de toda su vida, el fruto de años de arduo trabajo y dedicación.
Sin perder un instante, el afectado contactó a los números de emergencia. La respuesta fue inmediata: policías municipales arribaron a su domicilio, seguidos de cerca por personal ministerial y pericial. La Unidad Especializada en Investigación de Robo a Casa Habitación, Industria y Comercio tomó las riendas del caso, desplegando un meticuloso operativo para recabar pruebas y testimonios.
Esa misma tarde, la fortuna sonrió a la justicia. Elementos policiales lograron la detención de un individuo que circulaba en una motocicleta sin placas y con evidentes alteraciones. Durante la inspección, se le aseguraron dosis de droga y una considerable suma de dinero en efectivo, cuya procedencia el detenido no pudo justificar. Fue asegurado y puesto a disposición del Ministerio Público.
La pericia de los criminalistas fue clave. Cruzaron la información generada durante el día, estableciendo una coincidencia irrefutable entre el dinero decomisado al detenido y las características del efectivo robado a Juan Carlos. A partir de ese momento, la estrategia legal se unificó, dirigiendo las carpetas de investigación hacia una única dirección.
Analistas, peritos y policías investigadores trabajaron de la mano, entrelazando testimonios y verificando cada coincidencia. La evidencia técnica confirmó de manera contundente la relación directa entre el robo en el hogar de Juan Carlos y el sujeto detenido. La labor coordinada y el profesionalismo fueron fundamentales para este avance.
Con base en estas pruebas irrefutables, el Ministerio Público solicitó y obtuvo una orden de aprehensión contra el imputado, identificado como Jonathan Uriel N. En una audiencia inicial, el juez de control lo vinculó a proceso penal por los delitos de robo calificado y narcomenudeo en la modalidad de posesión simple, dictando prisión preventiva justificada mientras se resuelve su situación legal.
El desenlace del caso no solo trajo consigo la impartición de justicia, sino también un invaluable componente de justicia restaurativa. En las instalaciones de la Fiscalía Regional A, Juan Carlos recibió de vuelta el dinero recuperado. Acompañado por el equipo de la célula de investigación que llevó su caso, fue testigo de un trato digno y un respaldo institucional con un enfoque humanista, elementos que le devolvieron la confianza.
La Fiscalía de Guanajuato, a través de su profesionalismo y sensibilidad, demostró una vez más su rostro humano, devolviendo no solo los bienes a las víctimas, sino también la tranquilidad y la fe en las instituciones. Juan Carlos se retiró agradecido, con sus ahorros de vuelta y acompañado por agentes ministeriales hasta su destino, culminando así un proceso que le devolvió lo que con tanto esfuerzo había construido.