Descomplicado/Jorge Robledo
Escándalos de corrupción como La Estafa Maestra, Ayotzinapa, Segalmex, Odebrecht y Agronitrogenados son algunos de los casos que han visto la luz a solicitudes de información al gobierno.
Lo cierto es que en 2014, durante la presidencia de Enrique Peña Nieto, que se creó el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, INAI, el mandatario no imaginaba el importante instrumento que echaba a andar y que, en diez años ha tenido un papel clave para revelar escándalos de desvíos de recursos.
Uno de los mayores escándalos de corrupción en el sexenio de Peña Nieto, fue el caso de: La Estafa Maestra, desvío de mas de siete mil 600 millones de pesos que involucró a once dependencias de gobierno y ocho universidades, investigación conjunta entre Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad y Animal Político.
Se sumaron el caso de: La casa blanca, una lujosa residencia en Lomas de Chapultepec, que era propiedad de el Grupo Higa, contratista consentido del presidente y que, supuestamente vendió en 86 millones de pesos al presidente Peña Nieto y su exesposa Angélica Rivera.
Mexicanos Contra la Corrupción, que hoy es blanco de ataques del presidente López Obrador, tan solo del 2013 al 2018 documentó 35 casos de corrupción con personajes como: Elba Esther Gordillo y varios exgobernadores como el de Veracruz, Javier Duarte; Tamaulipas, Tomás Yárrington, y Chihuahua, César Duarte.
De la casa blanca a la casa gris
En el sexenio del presidente López Orador, se pasó de: La casa blanca a La casa gris, residencia en Houston, Texas, EE. UU. que habitaron (en 2019) el hijo del presidente, José Ramón López Beltrán y su esposa Carolyn Adamsy, la casa era propiedad de un alto directivo de la empresa Baker Hughes, que se vio beneficiada -durante los siguientes meses- con la asignación de 27 contratos por un valor de 150 millones de pesos, revelaciones también producto de la investigación realizada por Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
Pese a que la responsabilidad institucional obliga a cualquier presidente en turno, a investigar presumibles casos de corrupción y más si las investigaciones apuntan a su entorno inmediato y afectivo, la historia nos recuerda que los mandatarios, como dice la canción de Sabina, lo niegan todo, el problema es que en este momento, el presidente López Obrador dio un paso más y utiliza su poder, para desaparecer a los organismos autónomos como el INAI, que ha sido pieza clave para que esos casos de corrupción, salgan a la luz pública.
Es una realidad que la transparencia y el derecho de acceso a la información constituyen uno de los avances más importantes de la historia moderna de México y eliminar al INAI, será un gran atentado contra ellos.
Estocada grave al INAI
De esa forma, en materia de derechos humanos se vulnera el derecho universal a la información, así lo advierte el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos: el derecho a la información es la garantía fundamental que toda persona posee para atraer información, a informar y a ser informada.
Por esa razón cobra tanta relevancia el momento histórico que vivimos en México, pues el derecho a la información está estrechamente vinculado al derecho a la libertad de expresión que, a todas luces, el gobierno actual ha querido silenciar y, antes de finalizar, ha dado una estocada grave al INAI y, consecuentemente, al periodismo de investigación en este país.