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SAN DIEGO DE LA UNIÓN, Gto. 27 de febrero de 2024.- Ejidatarios de la comunidad de Cabras, perteneciente a San Diego de la Unión, impidieron este martes el acceso al predio de Santa Rosa a una actuaria del Tribunal Unitario Agrario del Distrito 11 y un perito del Tribunal Superior Agrario, quienes acompañados de la fuerza pública pretendían realiza una diligencia para quitarles 134 hectáreas.
“Que nos maten a todos, solo así entrarán”, advirtió Francisco Flores Wong, a nombre de los ejidatarios de Cabras.
El predio de Santa Rosa pertenece al Ejido de Cabras. La mayoría de ellos montaban a caballo, y en vehículos, bloquearon los accesos al predio.
“Le vamos a dar adelante hasta donde truene”, agregó Francisco Flores, frente a la actuaria, perito y elementos de las FSPE.
De acuerdo con los ejidatarios, no van a permitir que les quiten las tierras que aseguran son de ellos.
Asimismo, denunciaron que dolosamente, y en contubernio con autoridades, una persona identificada como Roberto Lascuráin quiere apoderarse de 134 hectáreas, de 495 de la ampliación del Ejido.
Los ejidatarios señalaron que mañosamente dos peritos de la extinta PGJ se vendieron, ya que cambiaron dolosamente el plano del Ejido de Santa Teresa y lo pusieron sobre el ejido de Santa Rosa, que es el que defienden, por lo que no están de acuerdo en que se los quiten.
Exhibieron que existe una carpeta de investigación, la 76681/2019 que aseguran no ha caminado, donde se demandó a los peritos y a Lascuráin por falsificación de documentos y fraude procesal.
Se trata de la tercera ocasión en que se busca restituir las tierras en favor de Roberto Lascuráin.
Los ejidatarios señalan que los peritos, cambiaron la ubicación del terreno y colindancias para favorecer a Lascuráin, afectado a Santa Rosa y a La Reserva.
El plano original tiene 4 lados y con la modificación quedó en siete.
Un tercer peritaje de la ahora Fiscalía Genera del Estado establece que los ejidatarios tienen la razón, y que el peritaje elaborado por los dos peritos señalados por los ejidatarios, era erróneo.
Los ejidatarios reiteraron que no permitieron ni van a permitir que les quiten sus tierras.
Esto es tan solo la punta del iceberg sobre complicidades de autoridades y artimañas legales que se irán exhibiendo.