Freddy/Norberto Gasque Martínez
“Desarrollo rural efectivo en Gto., un camino”
En Guanajuato llevamos años con programas sociales como Mi Familia Productiva, antes Mi Familia Productiva y Sustentable y antes Mi Patio Productivo etc. cuyo objetivo teórico, al margen de los nombres, era el mismo: impulsar el desarrollo rural, que siendo objetivos, no se ha logrado.
Una de las razones por las que, opino, no ha funcionado el desarrollo rural, es porque se ha abordado parcialmente, ya que un apoyo con gallinas o chivas o un molino, sin un cambio en las personas apoyado en desarrollo humano y sin capacitación para aprovechar eficazmente el apoyo, tiende a ser ineficaz.
Un buen principio sería revisar y redefinir los objetivos de la Secretaría del Campo en función de la realidad actual, climática, política, social y económica. Para ello me aventuro en proponer como ejes:
Otro ejercicio necesario sería revisar el estado actual de aquellas familias y productores que se apoyaron con programas sociales en el 2021, 22, 23 y 24, para verdaderamente conocer el impacto que se tuvo y se tiene en el desarrollo; dicho con palitos y bolitas, verificar cuántos de los apoyos otorgados fueron base para un mejoramiento económico y en la calidad de vida de los beneficiarios. Si el resultado es mayor que el 60% un aplauso y a seguirle, si el resultado es menor al 20%, es tiempo de sentarse a replantear las políticas y programas de desarrollo social porque, citando a Albert Einstein: “Locura es hacer lo mismo y esperar resultados diferentes”.
En lo que se elabora el diagnóstico del impacto o no impacto de los programas sociales, con la intención de abreviar el tiempo para tomar decisiones e implementar soluciones doy dos datos: 1.- Es tal el deterioro social en Guanajuato, que somos uno de los estados con mayores índices de violencia e inseguridad, y 2.- Es tan pobre el impacto de los programas sociales, que en el municipio de Celaya, al que se le puso particular empeño, no solo se perdió la alcaldía sino que también se perdieron electoralmente las diputaciones… Dicho en otras palabras, uno de los indicadores del buen trabajo de un gobierno y del éxito de sus programas, es el refrendo, por medio del voto ciudadano, para dar continuidad a una propuesta de gobierno.
Dicho lo anterior, reitero, lo más valioso de México es su gente; el capital humano es la clave del desarrollo, pero no se da solo, hay que formarlo y construirlo para poder tener desarrollo; por lo que una propuesta innovadora sería: desde la Secretaría del Campo, abordar el desarrollo rural sustentado en el desarrollo humano para lo que, opino, es necesario formar ciudadanos para convivir civilizadamente con principios y valores; también es necesario educar para que esos ciudadanos sean funcionales y sirvan a la sociedad y a Guanajuato al construir una sociedad que pueda vivir en paz y con tranquilidad y finalmente es necesario capacitarlos para dotarlos de las capacidades técnicas para ser productivos y así, mediante el trabajo honesto aportar a la sociedad y a Guanajuato una vida productiva que enriquezca y sea cimiento a una convivencia social en donde la inequidad, la pobreza y sobre todo la desnutrición, no tengan cabida…
¿Cuál es la propuesta para lograr lo dicho?: Enriquecer la Dirección de Desarrollo Rural de la Secretaría del Campo con una Dirección de Innovación, Investigación & Desarrollo encargada de: 1.- Recopilar la información sobre métodos y técnicas de producción, ancestrales e innovadoras, que garanticen el éxito en la producción de alimentos a través de la agricultura regenerativa, la Permacultura y la agroecología; ello incluye coordinarse con el INIFAP, Fundación Produce, TEC de Roque e instituciones similares. 2.- Socializar mediante un modelo educativo innovador, la información a través de escuelas primarias, secundarias y bachilleratos, Centros Nuevo Comienzo, huertos escuela (MinigranjasGTO), Cecytes, Tecnológicos, universidades y huertos comunales (Propuesta innovadora, dotar de tierra a quienes no tienen acceso para producir sus alimentos); la propuesta, en pocas palabras, es que como política de Estado, todos, de una forma u otra nos dediquemos enseñar y a producir alimentos sanos, 3.- Contar con un campo experimental en dónde se pruebe y compruebe lo que se va a enseñar al tiempo que sirve de escuela de la tierra para formar formadores que lleven los saberes a sus comunidades. 4.- Construir redes comerciales y mercados locales y regionales como apoyo a la comercialización de excedentes o como espacio de trueque entre vecinos productores. 5.- Apoyar la organización para la producción y proyectos de agroindustrialización y procesamiento de alimentos con modelos cooperativistas.
Tareas concretas de la Dirección de innovación, investigación & desarrollo en relación con las Unidades de Producción Familiar serían: 1.- Enseñar a las personas, a las familias, a producir eficientemente alimentos en huertos de traspatio, macetas, azoteas, etc. y 2.- Hacer rentables las parcelas de pequeños productores a través de la diversificación, parcelas que por su naturaleza se orientan a mercados locales y regionales es decir, a alimentar al pueblo, y 3.- Promover la organización productiva, por sistema producto, como base a la agroindustrialización y procesamiento de alimentos.
Los conflictos armados en Gaza y Ucrania y el pleito por Taiwán auguran guerras, la pérdida de mercados, una crisis económica global y el rompimiento de cadenas productivas que crearan desabasto; el cambio climático y el calentamiento global auguran sed y hambruna para los pueblos de la tierra, no hablamos de economía, ni de política, ni de estrategias comerciales, hablamos de supervivencia a través de la producción de alimentos y el cuidado de los recursos naturales como tarea central de la Secretaría del Campo con un nuevo enfoque que privilegie la Seguridad Alimentaria y el Desarrollo Rural, sobre el negocio del agro, las exportaciones o el abasto a empresas trasnacionales de alimentos procesados. En pocas palabras, se propone privilegiar a las personas sobre las ganancias y devolver al campo su vocación prioritaria como fuente de alimento de los mexicanos; lo que daría pie a una decisión política trascendente: cambiar a la Secretaría del Campo en Guanajuato, del eje económico al eje social, es decir, de priorizar lo económico a priorizar a las personas.
Concluyendo, en una sociedad de personas, el progreso y el buen vivir se logra con personas bien alimentadas y educadas, el desarrollo económico se logra con personas capacitadas y la convivencia de calidad y excelencia para construir una sociedad ideal en donde se viva con paz y tranquilidad, se logra formando a quienes en el futuro serán los ciudadanos que conformen esa sociedad… Así de sencillo.
Un saludo, una reflexión.