Policía Municipal de León detiene a 2 presuntos homicidas
LEÓN, Gto., 27 de marzo de 2024.- Las llamas rugen en la Sierra de Santa Rosa de Lima, donde en apenas 48 horas han arrasado con 300 hectáreas de bosque. Con vientos desfavorables desafiando sus esfuerzos, bomberos y voluntarios se afanan por contener la voracidad del fuego que se extiende sin tregua.
El fuego ha dejado su huella en las proximidades de Ciénega Grande y Cieneguita de San Bartolo, según informes de la Dirección Municipal de Protección Civil, la Policía Rural y la Policía Ambiental de Guanajuato capital.
En medio de esta batalla contra las llamas, las redes sociales se alzan como un clamor de ayuda. La comunidad solicita donaciones de herramientas indispensables para la lucha, desde palas y picos hasta aspersores y rastrillos. También se requiere agua, electrolitos y alimentos enlatados, junto con prendas básicas como calcetines y ropa interior de algodón para hombres y mujeres de todas las tallas.
Este incendio no solo representa una amenaza para el entorno natural, sino también para la salud de las comunidades cercanas, como Dolores Hidalgo. El humo resultante puede tener consecuencias devastadoras, desde irritación ocular hasta complicaciones respiratorias y cardíacas.
Según un estudio publicado en el Journal of the American Heart Association, que habla de la complejidad de los riesgos asociados al humo de los incendios forestales. Este humo contiene una variedad de gases y partículas que pueden desencadenar enfermedades respiratorias y cardiovasculares, planteando interrogantes sobre los efectos a largo plazo en aquellos expuestos repetidamente al humo durante periodos prolongados.
En este escenario, la colaboración entre los servicios de emergencia, las autoridades locales y la comunidad se vuelve crucial para contener el incendio y mitigar sus impactos devastadores tanto en el medio ambiente como en la salud pública.