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GUANAJUATO, Gto., 27 de marzo de 2025.- Con el objetivo de fortalecer la legislación en materia de igualdad y no discriminación, los grupos parlamentarios del Partido Acción Nacional (PAN) y del Partido de la Revolución Democrática (PRD) presentaron una iniciativa de reforma a la Ley para Prevenir, Atender y Erradicar la Discriminación en el Estado de Guanajuato. La propuesta busca prohibir explícitamente la discriminación laboral basada en el embarazo, la maternidad y la lactancia.
La diputada Noemí Márquez Márquez, encargada de presentar la iniciativa ante el pleno, destacó que a pesar de los avances logrados en materia de derechos de las mujeres, aún persisten formas de discriminación basadas en el sexo y género. Señaló específicamente la problemática que enfrentan mujeres embarazadas en sus entornos laborales, donde a menudo son objeto de prejuicios y tratos desiguales por parte de sus empleadores.
Márquez Márquez explicó que las mujeres embarazadas frecuentemente se encuentran en situaciones de vulnerabilidad en el ámbito laboral, ya que algunos empleadores las perciben como menos comprometidas o con menor capacidad para desempeñar sus funciones debido a su estado. Estas actitudes, subrayó la legisladora, constituyen prácticas discriminatorias que impactan negativamente en la salud física y mental de las mujeres, pudiendo generar estrés, angustia e incluso la pérdida del empleo.
La diputada fundamentó su propuesta con estadísticas que revelan la magnitud del problema. Mencionó que el 21.7 por ciento de las mujeres en el último año reportaron haber experimentado alguna forma de discriminación laboral. Dentro de estos casos, un 4% de las mujeres fueron obligadas a presentar pruebas de embarazo como requisito para ser contratadas o para mantener su empleo, mientras que un 0.6% sufrió discriminación directa por embarazarse, incluyendo despidos, no renovación de contrato o reducción salarial.
Márquez Márquez enfatizó que la discriminación laboral por embarazo no solo vulnera los derechos laborales de las mujeres, sino que también afecta sus derechos reproductivos, la salud de sus bebés y el bienestar de sus familias. Subrayó que la importancia de prohibir esta forma de discriminación radica en que se basa en el sexo y, por lo tanto, afecta de manera desproporcionada a las mujeres por el simple hecho de serlo.
La legisladora concluyó su intervención haciendo un llamado a reconocer el embarazo y la maternidad no como una desventaja laboral, sino como parte integral de la vida de las mujeres. “El combate a este tipo de discriminación debe enfocarse en posicionar al embarazo y la maternidad en el eje de todas las acciones y estrategias implementadas en los distintos sectores sociales, especialmente en el laboral, a fin de cambiar la percepción social de que es una desventaja”, afirmó. La iniciativa fue turnada a la Comisión de Derechos Humanos y Atención a Grupos Vulnerables para su análisis y dictamen.