Cumbre Quadratín, 3 días de análisis del desafiante periodismo actual
LEÓN, Gto., 29 de agosto de 2024.- En medio de la crisis hídrica más severa que ha enfrentado el estado, seis municipios de Guanajuato están lidiando con serias deficiencias en el tratamiento de aguas residuales.
Cuatro de estos municipios – Comonfort, Villagrán, Jaral del Progreso y Pueblo Nuevo – carecen completamente de infraestructura para el saneamiento de aguas residuales, lo que resulta en la descarga directa de aguas domésticas, industriales, agrícolas y pecuarias a ríos y cuerpos de agua.
Además de esta problemática, dos municipios que sí cuentan con plantas de tratamiento de aguas residuales (PTAR) enfrentan sus propios desafíos, según consigna el Periódico Correo.
En Xichú, la planta está fuera de funcionamiento, mientras que en Victoria, la planta opera de manera intermitente. En conjunto, estos seis municipios albergan a poco más de 234,000 personas.
La falta de tratamiento adecuado de sus aguas residuales tiene un impacto negativo significativo: la contaminación de ríos, lagos y terrenos no solo deteriora la calidad del agua, sino que también afecta gravemente la biodiversidad local.
La ausencia o deficiente funcionamiento de las PTAR en estos municipios conlleva serias consecuencias ambientales, sanitarias y económicas. La contaminación del agua incrementa el riesgo de enfermedades infecciosas gastrointestinales, hepáticas y dérmicas entre la población y el ganado.
Además, la falta de tratamiento adecuado deteriora los ecosistemas acuáticos, afectando a las especies locales y comprometiendo la calidad del agua disponible para consumo y uso agrícola.